Recupera la venta de Tú a Tú en tu Centro de estética

Seguro que el amor que sientes por tu profesión fue lo que te motivó a montar tu propio negocio de estética. Sin embargo, la realidad de un negocio de este tipo puede ser una historia muy distinta.

Tanto si estás comenzando como si llevas varios años en activo, es normal sentirte abrumada por todas las tareas diarias que necesitas desempeñar.

Tal vez te sientas paralizada porque tienes muy buenas ideas, pero no sabes por dónde empezar. Tal vez hayas invertido tiempo y dinero en un par de cosas nuevas, pero sin embargo no han salido como tenías previsto y esto está provocando que te sientas atrapada.

Quizás hayas creado una nueva oferta que pensabas que sería un éxito y en cambio el resultado ha generado en ti más incertidumbre y miedo que otra cosa.

A veces uno tiene la sensación de que su negocio está continuamente girando sobre el mismo eje, como si de un hámster se tratase.

Quiero mostrarte cómo detener esta locura en 5 pasos.

5 pasos para salir del atasco en tu negocio de estética

1. Cultiva la conciencia

A veces nos enamoramos tan profundamente de nuestras propias ideas que es difícil dejarlas ir.

Si uno no se da cuenta de que está atascado es muy difícil tomar las acciones apropiadas.

Tómate tu tiempo para desconectar. Dedica un día a la semana o al mes a despreocuparte de manera absoluta de todas las operaciones que realizas día a día en tu negocio. Esto te va a permitir evaluar y planificar de forma objetiva. Tendrás una mente más despierta y podrás desarrollar nuevas capacidades de manera inteligente.

2. Realiza un inventario de tu negocio de estética

Es casi imposible tener una visión clara de lo que está pasando en tu negocio si todo está girando exclusivamente en tu cabeza.

Poner tus ideas sobre el papel es el primer paso para conseguir claridad.

  • Haz una lista de todas las actividades que realizas en tu negocio para generar ingresos: micropigmentación, depilación, venta de productos, tratamientos…
  • Divide la lista en tres categorías: rentable (lo que funciona), lo que se necesita potenciar o mejorar y lo improductivo (no genera ingresos o está provocando una hemorragia financiera).

3. Si no sirve, déjalo marchar…

Echa un vistazo más de cerca a lo improductivo y responde a esta pregunta:

¿Por qué estoy tratando de hacer que funcione?

Es muy frecuente que los propietarios de un centro de belleza se aferren a una mezcolanza de ofertas o propuestas que ya no sirven y teman deshacerse de ellas por distintos miedos:

  • «¿Si quito esta oferta o servicio perderé clientes?».
  • «¿Qué pasa si los clientes piensan que no soy lo suficientemente bueno por no tener una larga lista de servicios y promociones?».
  • «¿Qué pensarían de mi si no dispongo de la tecnología o productos más novedosos?».
  • «Todo el mundo está ofreciendo este servicio, ¿tengo que subirme al carro para hacer lo que hace todo el mundo?».
  • «He invertido tanto en esa herramienta o en esa formación… ¿puedo hacer más para promoverla en mi negocio o solo me ha generado conflictos personales y profesionales?».

Todo tiene un coste de oportunidad. Si estás gastando tiempo, dinero y energía en cosas que no funcionan, ese tiempo hace que pierdas oportunidades para conseguir ideas que estén en consonancia con tus fortalezas y visión para crear un negocio mejor y más rentable.

Por otra parte, si ofreces una gama de servicios sin especializarte en nada, las personas te verán como un negocio más en lugar de como una experta.

«Cuatro ojos ven más que dos»: por ello dirígete a una persona de confianza o a un experto para que valore tu plan empresarial de manera objetiva y pueda ayudarte a decidir qué actividades están o no en consonancia con tu negocio.

Soltar lo que no funciona no será fácil, aunque sí será positivo.

4. Toma una decisión sobre lo que necesitas mejorar

A continuación, examina los elementos de la lista «potenciar o mejorar»:

En primer lugar tienes que decidir si vale la pena el tiempo y dinero invertidos. No tenemos tiempo ni recursos ilimitados, por lo que debes asegurarte de que si te vas a enfocar en algo vas a obtener una rentabilidad de la inversión.

Si no lo tienes claro:

  • Prioriza: crea una lista de criterios para ayudarte a decidir qué artículos vas a potenciar. Puedes tener en cuenta el potencial de ingresos, la facilidad de implementación, la mejora de tu bienestar (si es algo que te mantiene estresada todo el día, piensa que tu energía negativa puede tener un impacto absoluto en tu negocio).
  • Crea un plan: para cada artículo anota los pasos y las acciones que debes tomar. Pon una fecha límite a cada acción y reserva tiempo en tu agenda para hacer el trabajo.

5. Hacer que lo que funciona funcione mejor

Por último, vas a consultar la lista de las cosas que están funcionando y estudiar cómo puedes hacer para mejorarlas; por ejemplo, generando más ingresos.

Esos productos o servicios son propensos a reflejar lo que tus clientes quieren  y necesitan. Crear otros relacionados probablemente se traduzca en más clientes.

Tal vez necesitas agilizar la administración para aumentar tu eficiencia. Tal vez quieras centrar tu esfuerzo en la comercialización. Quizás quieras aumentar el volumen de ventas y para ello puedas negociar una mejor fijación de precios con tu proveedor.

Si has sido capaz de anotar un buen número de artículos en el paso tres, lo más probable es que hayas creado un poco de espacio en tu mente y en tu calendario para trabajar en las mejoras.

Un buen empresario del mundo de la belleza (y de cualquier otra área) necesita reinventarse para hacer que su negocio crezca de forma rentable. Mantener una mente abierta y observar de manera objetiva la realidad puede llevarte a encontrar tesoros ocultos en tu mapa de negocio que antes no habías podido ver.

Si te sientes atascada y necesitas mayor claridad, apodérate de un trozo de papel y haz un análisis rápido . Este proceso te dará tiempo y te aportará tranquilidad.

Haz clic aquí para ver cómo puedes consolidar y fortalecer tu negocio de estética, mejorar la gestión, aumentar tu facturación y rentabilidad y fidelizar a tus clientes.

El momento es ahora.

MÁS ARTÍCULOS